Si te gusta la pizza pero quieres comer más sano, tu alternativa es la Pinsa Romana, porque con respecto a la pizza, la pinsa es:
Seguro que te preguntarás cual es el secreto para que una especialidad aparentemente tan parecida tenga propiedades tan diferentes.
Este eslogan lo han utilizado siempre los pizzeros para diferenciarse de los demás, pero en el caso de la pinsa es verdaderamente así, el secreto de la pinsa está en su masa. Bueno, ya no es tan secreto porque te vamos a explicar como hacemos la auténtica pinsa romana en nuestro local PINSA DI ROMA de la calle Ribera 10, en Valencia.
A diferencia de la pizza, la pinsa se elabora con una mezcla de:
Estos ingredientes 100% vegetales dan lugar a una mezcla de granos muy proteica, sin ninguna grasa mas allá que el aceite de oliva extra virgen.
La harina de arroz retiene mucha más agua que la tradicional de trigo, por lo que la masa de la pinsa llega a contener hasta un 80% de agua, siendo de esta manera mucho más digestiva y ligera que la pizza.
Claro, porque las harinas de soja y de arroz requieren una fermentación más larga que la harina tradicional de trigo. En PINSA DI ROMA fermentamos la masa de nuestras pinsas entre 48 y 72 horas, lo que aporta una jugosidad y textura realmente deliciosa.
Existe cierta controversia sobre el origen de la pinsa romana, algunos sostienen que viene de los romanos y otros dicen que es un invento muy moderno, concretamente de finales del S.XX.
En realidad todos tienen razón, si entendemos la pinsa como una focaccia de mezcla de granos, si, efectivamente su origen se sitúa en tiempos de los romanos. Se sabe que en Ostia Antica (el antiguo puerto de Roma) los panaderos mezclaban diferentes tipos de harina para hacer sus focaccias.
Sin embargo, si entendemos la pinsa como la mezcla actual de harinas de soja, trigo y arroz, debemos decir que este maravilloso invento data de finales de los años 90 del pasado siglo.
No cabe duda de que los romanos eran muy inteligentes, pero de algo nos tiene que haber servido los 2,000 años de aprendizaje que llevamos después de ellos.
Hemos conseguido comer pizza de una forma más saludable y sabrosa, esto debe ser la evolución esa de la que hablaba Darwin. 😀
Si estás en Valencia puedes probar ahora la auténtica Pinsa Romana, puedes venir a nuestro local de la calle Ribera 10, o te la podemos llevar a casa con reparto gratuito para pedidos superiores a 15€.
¡Buon appetito!